Tenía la esperanza de quedar esta tarde, pero al final mis planes no han salido como tenía pensado. Reconozco que al principio me ha sentado mal. Pero luego mi plan alternativo me ha gustado también.
Mi plan alternativo es dedicarme la tarde a mi y descansar.
Hace mucho que no estoy tranquila en el sofá viendo la tele. No suena a planazo, pero la verdad es que me apetece mucho.
Así también paso más tiempo con mis gatos, que con el trabajo los tengo un poco abandonados. Y está siendo un periodo de cambio y adaptación no sólo para mi, sino también para ellos y creo que pasar una tarde tranquila nos va a venir bien.
Estoy muy contenta con mi nueva vida, por fin estoy independizada y me he mudado con mis niños
Estoy segura de que este es un gran año para mi 😊
Diario de LauraV
sábado, 8 de junio de 2019
martes, 12 de marzo de 2019
LAS BARRAS DEL METRO
Querido viajer@, se que tu piensas
que está bien abrazarse a la barra del metro mientras estás con el móvil o simplemente
descansas tu cuerpo, pero si miras a tu alrededor y ves que hay mucha gente y
parte de ella está a tu alrededor intentando agarrarse a esa barra tan preciada
para ti, aparta un poco tu cuerpo de ella y deja que otras manos se enganchen.
Me pregunto, si esas personas no
notan como otras manos se intentan hacer hueco entre su ropa y la barra para
poder agarrarse y no caerse por los movimientos del metro.
¿Tendrán para esas personas un imán
que hacen que se peguen y no se suelten hasta que llega su parada?
Puede que lleve mucho tiempo sin
viajar en metro y no entienda las nuevas leyes, pero ¿Qué está pasando?
Hoy me he encontrado a una
señora, que no se estaba abrazando a la barra, estaba agarrada a dos barras ocupando
mas espacio del necesario mientras yo estaba como una sardina en lata debajo
del sobaco de un señor.
Yo había escuchado que entrar con
el coche en el centro de Madrid era como adentrarse en la jungla y que era la
ley del más cara dura. Pues señores, el metro es igual.
No sé si las tecnologías atontan
la mente humana, que necesitan abrazarse a la barra del metro para poder seguir
viendo esa película o serie, para chatear o ponerse al día en las redes
sociales. Sinceramente me da igual. No cuesta mucho levantar la vista de la pantalla
unos segundos para ver que otras personas necesitan agarrarse a esa preciada
barra.
Y esto es sólo una de las cosas
que me encuentro en el metro a diario. Otro día os cuento otras cosas como las
preciadas mochilas que te golpean, los olores magníficos a primera hora de la
mañana, las carreras por coger asientos…. Seguro que a vosotros os pasa lo
mismo y algunas cosas más que a mí. Yo en el fondo soy novata en esto de viajar
en metro.
PD: si hay algún lector que se sienta identificado y sea de los que abrazan las barras del metro, me encantaría escuchar su versión y entender el motivo por el que lo hacen
¿Qué tienen las barras del metro
que a tanta gente le gusta abrazarlas?
jueves, 24 de enero de 2019
LOS CAMBIOS
LOS CAMBIOS
En demasiadas ocasiones los cambios, la incertidumbre de no
saber qué va a pasar, nos produce ansiedad.
Pero realmente, lo que tendría que producirnos ansiedad es
estar siempre en nuestra zona de confort, sin arriesgarnos, sin tomar caminos
nuevos. Aunque no nos demos cuenta el cuerpo acaba entristeciendo.
¿Cuántos de vosotros estáis en un trabajo que no os gusta
simplemente por seguridad y estabilidad? Por desgracia, son muchas personas las
que se encuentran en esa situación, el miedo al cambio y perder esa estabilidad
es enorme. Y se acaban resignando a una vida de infelicidad por tener una
seguridad.
Al final la vida se convierte en una mera supervivencia en
vez de vivir alegremente los días que estamos aquí. Cuando queremos darnos
cuenta, ha pasado demasiado tiempo. Hemos invertido demasiado tiempo en cosas
que no nos hacían feliz por miedo a los cambios.
¿Cuántos pensáis que empezaréis a disfrutar de verdad cuando
os jubiléis? ¿Por qué esperar a ser feliz, a hacer las cosas que queréis a los
65 años? ¿Por qué no hacerlo ahora o a corto plazo?
Yo no tengo trabajo fijo, no tengo una estabilidad económica
y reconozco que me produce ansiedad en muchas ocasiones. Pero las cosas a las
que me dedico me hacen feliz. No quiero arrepentirme el día de mañana de haber
estado trabajando en un sitio que no me gusta. Más que por el hecho de trabajar
en algo en lo que no me siento realizada es porque se le dedica muchas horas al
trabajo, gran parte de tu vida se esfuma trabajando, porque no hacer que ese
tiempo, ya que es obligatorio, sea agradable.
El arriesgarse, el que se produzcan cambios en tu vida te acaba haciendo más sabio y más feliz.
jueves, 17 de enero de 2019
Día 17 de Enero
Hace tiempo, mucho tiempo,
eliminé todas las entradas de este blog. ¿Por qué? Porque quería eliminarlo. El
motivo de que siga activo no es porque cambiara de opinión, sino porque no supe
hacerlo.
Este fue mi primer blog, un
intento de llegar a la gente a través de mis experiencias personales, con el
fin de ayudar a otras personas. Pero, a la vista está, de que no conseguí mi
objetivo, el blog se convirtió en una comidilla sobre mi vida amorosa. Por
supuesto, la culpa de eso, la tuve yo, no supe gestionar bien muchas
situaciones y las hormonas de una chica de poco más de 20 años no ayudaron
mucho.
He vuelto a escribir un millar de
veces, las mismas que he eliminado lo que he escrito. No sé muy bien en que
dirección quiero que vaya, pero, como eliminé todo lo que había, os cuento un
poco mi situación, soy una chica de 31 años que no sabe que hacer con su vida,
estoy más o menos igual que cuando tenía 20 años, o incluso peor, creo que con
20 años tenía las cosas más claras.
Actualmente estoy trabajando,
aunque no creo que sea el trabajo de mi vida, pero tengo que sentirme, y me
siento, muy afortunada por tener trabajo. Todavía no he encontrado un trabajo
en el que quiera pasar el resto de mi vida y voy camino de los 40, bueno a lo
mejor exagero un poco diciendo que voy de camino a los 40, pero se supone que
con 31 años tendría que saber a qué dedicarme y todavía no lo sé.
Actualmente vivo en casa de mis
padres, estuve tres años viviendo con una pareja, pero la cosa se torció y volví
al hogar familiar, donde sigo. Aunque, en poco tiempo estaré en mi casita con
mis dos gatos.
Si lo habéis pensado puede que
estés en lo cierto, mujer de 31 años con gatos, va a terminar muy mal… jejeje
es posible, aunque todavía no he perdido la esperanza de encontrar a un hombre
con el que congenie y duremos toda la vida.
Llamarme romántica, pero creo que
existe el amor para toda la vida, aunque por supuesto con discusiones, eso es
inevitable.
Mi vida amorosa… pues… no creo en
las aplicaciones de buscar pareja por internet, pero al final caí en la tentación
convencida por mi hermana y ahora estoy conociendo a un chico muy agradable.
Soy voluntaria en una asociación
de animales, me gustaría colaborar más pero el horario de trabajo me impide
implicarme más. Pero puedo aportar algo y para mi es muy importante ya que es
un sueño que tenia desde pequeña, poder ayudar a los animales.
Al final me he emocionado y he
escrito más de lo que había pensado. Ya por hoy lo dejo.
Un saludo y un beso muy fuerte a
todos
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